Comunícate con “amor”…

Mucha comunicación y poco tiempo…, la relación entre los seres humanos cada vez se pierde más.
Tanto progreso en el mundo de las computadoras y celulares nos deja poco tiempo para disfrutar de sí mismo y de la familia.
“El enemigo crece”, esta es la razón en que todo se vuelve enemistad, malos entendidos, envidias, las burlas de uno a otros etc.…
No estamos a gusto con nosotros mismos, no queremos ni sabemos cómo aceptarnos, aumentando cada vez más una complejidad innecesaria.
Obtener una profundidad de la vida, ser más reales a cada etapa solo lo da: la limitación de las cosas, el fracaso, una pérdida, una enfermedad, en una palabra “el dolor”.
Saber distinguir entre el bien y el mal es algo que se debe aprender cada día y a cada segundo, si nos dedicáramos a contar los pensamientos, la suma de los “malos pensamientos” sobrepasaría a los “buenos pensamientos”, y para poder llegar a tener la paz interior hay que saber combatir los malos.
Los medios de comunicación son extremadamente adelantados, ---yo diría--- “poderoso” ,

¡pero sin “amor”!.

L La Villa.

¡Hasta lo “dulce” empalaga!

En un concurso del mejor pastel, varias personas van probando, hasta llegar a encontrar el que mejor sabor tiene, a pesar de tener los mejores y más ricos ingredientes, especialmente; chocolate, miel, azúcar, etc. Y de tanto probar y probar, te llega a empalagar ocasionándote malestar.
Muchas veces el cuerpo te pide comer “algo dulce”, y cuando comes un poco, ya se calma ese “deseo”, y no quieres continuar.
Así mismo es cuando conoces a alguien por primera vez, los primeros tiempos son como el “dulce”, se disfruta y se saborea, pero si te dan demasiado ---el cerebro avisa--- que no deseas comer más.
Si se come rápido y con ansiedad, te parece que disfrutas, pero el placer se acaba pronto...
Un “dulce combinado”, te ayudara a controlar el “azúcar en la sangre”, por eso es mejor en pocas cantidades, saboreándolo bien y sin apuro.

L La Villa.

La lucha consigo mismo.

La peor de las lucha, de estos tiempos…

Si hablamos de “cirugía estética”, pensamos automáticamente en la mujer, pero no somos nosotras las únicas, también los hombres tienen “esta lucha”.
La inseguridad, abunda en todo…, si fijamos la vista en alguien, buscamos algo que se arreglo, si luce bien…, y si no, pensamos; que debería hacerse algún arreglito, en los ojos, en la frente, en la papada, más arriba o más abajo.
Ya hay tantos implantes caminando por ahí, que si existiera una máquina para detectarlos, por una orden de registro como en los aeropuertos, todo el mundo se vería desinflado en las computadoras.
Los pompis son implantes, los senos son implantes, los cabellos son implantes, los rostros están inflados por el botox, las varices de las piernas y muslos, están escondidas…, es muy probable que me haya olvidado de algo ¿le vino algo a la mente…? ¿a que no pensó en la renovación del espíritu…?, !si, ya se!, esto es invisible.

Conclusión. Vivamos mas despreocupados de nuestras luchas, recordemos que todos los implantes son de plástico, duración, “temporal”.
Y si le quedo un tiempecito…, alimente alma, es muy probable que también este deteriorada, le saldrá más económico. Solo con “palabras” de vida.
L La Villa.